domingo, 31 de mayo de 2009

Matías, el sabio (4 años)

A raíz de una actividad escolar de Matías, tuvimos él y yo, una plática sobre la ira. Me contó que él había entrado en un túnel y había dejado la ira en él. Y luego me dio una gran lección.
Mamá, me dijo desde el asiento trasero del coche, se vale tener enojo... lo que no se vale es tener ira.
¿Por qué si a un niño de 4 años le es tan fácil expresar tal verdad, a nosotros los adultos nos cuesta tanto entenderla?